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Allá por 1964, Juan Angulo Zamora (fundador) comenzó su andadura en el sector de la construcción como autónomo en Sevilla. Su vinculación con este sector comenzó desde muy pequeño, ayudando a su padre albañil. Este primer contacto con el mundo de la construcción lo llevó a tomarlo como profesión. Conforme la empresa avanzaba, la segunda generación, conformada por los hijos de Juan Angulo Zamora, fue incorporándose a la empresa de forma paulatina.
El primero en entrar fue Juan Angulo Sánchez, actual Director General. Motivado por su entrada y por la adquisición de una serie de solares en Málaga, decidieron trasladar su sede a dicha ciudad, a la que Juan Angulo Sánchez también se mudó. El resto de sus hermanos pequeños, sin embargo, mantuvieron su residencia en Sevilla.
Tras capear con cierta dificultad pero con resultados satisfactorios la crisis económica de los noventa, se produjo la incorporación de la hija, Rosa Angulo Sánchez, allá por 1997. Antes de su entrada a la empresa, Rosa Angulo Sánchez terminó sus estudios universitarios en la Universidad de Sevilla, pero su incorporación se produjo en la sede de Málaga. Fue por aquel entonces cuando se constituyó oficialmente la sociedad que a día de hoy gestiona y comercializa cada una de sus promociones inmobiliarias. Antes de producirse esta integración vertical, era una inmobiliaria ajena a la empresa la que se encargaba de la comercialización de todas sus promociones.
Unos años más tarde, estalló la crisis financiera de 2007-2008, crisis que supuso un verdadero reto para el tejido empresarial español, especialmente para el sector de la construcción y, por ende, para las sociedades inmobiliarias. Sin embargo, consiguieron de nuevo sobrevivir, esta vez con mayor facilidad, debido a que no mostraban una excesiva dependencia de fuentes de financiación externas. A lo anterior también les ayudaron los solares destinados a Viviendas de Protección Oficial (VPO) que adquirieron de forma previa a la crisis. Tal y como relata la propia Rosa Angulo Sánchez, “se tuvo la visión y previsión de comprar los solares VPO sin saber que pudieran ser rentables”. Cinco años más tarde, la familia Angulo Sánchez firmó un protocolo familiar en el que están unidos todos los miembros familiares, reuniéndose dos veces al año en el Consejo de Familia.
A día de hoy, Grupo ANSAN posee cerca de 800 VPOs alquiladas en Sevilla y Málaga. Además de lo anterior, ha ejecutado numerosas promociones dirigidas a diferentes públicos y ubicadas en zonas de Málaga (Mijas Costa, Benalmádena, Torremolinos, Puerto de la Torre y Teatinos) y Sevilla (San José de la Rinconada). El equipo de dirección lo componen, además de Juan Angulo Sánchez (actual Director General) y Rosa Angulo Sánchez (Directora Departamento Financiero y Administración), un tercer hermano no mencionado hasta ahora, José María Angulo Sánchez, quién dirige la delegación de Sevilla. La propiedad es 100% familiar, y el Consejo de Administración lo forman los tres hermanos y un consejero externo.
Profesionalización. “El secreto es saber separar lo profesional de lo familiar. No hay otro secreto para que todo funcione bien. El que tienes al lado, da igual que sea tu hermano o tu primo, al final es un compañero más y cada uno tiene que hacer su parte”.
Crecimiento lento. Sostienen que no tienen pensado expandirse más por el momento. Hicieron una incursión aislada en Algeciras hace años por unos terrenos que compró su padre, pero continuarán operando en Sevilla y Málaga.
Honestidad y austeridad. Afirman que siguen al pie de la letra los valores que les inculcaron sus padres, especialmente por parte del fundador, Juan Angulo Zamora: honestidad, austeridad… “Eso es lo que intentamos transmitirle a la tercera generación”.
Continuidad familiar. “Nuestra idea es que la tercera generación continúe con la empresa”. Algunos ya se encuentran dentro de la empresa y otros no descartan hacerlo en un futuro próximo. También ponen de manifiesto que “a veces, cuando en las empresas las funciones están separadas, hay enfrentamientos entre las mismas si no reman siempre hacia la misma dirección”. Para evitarlo, la familia controla desde la compra del solar hasta la venta y la postventa: “Nos encargamos de todo el proceso completo en absoluto”.
Tal y como destaca la propia Rosa Angulo Sánchez, “la construcción es una ciencia muy viva, en continua transformación”. Son dos las principales innovaciones que ha introducido la empresa en el mercado para distinguirse de la competencia. La primera de ellas es la instalación de los premarcos sin tener el cerramiento hecho. Esto contribuye a que haya mayor estanqueidad y fijación, afirman. La segunda se encuentra relacionada con las instalaciones.
En sus promociones, comienzan con la fontanería y luego proceden con las paredes. Así, esta última no debe romperse para introducir los conductos oportunos, lo que mejora considerablemente la consistencia de los ladrillos. Aunque son mejoras que pueden pasar desapercibidas, son clave para marcar la diferencia. Así lo recoge José María Angulo Sánchez: “el que lo usa no lo ve, pero con el tiempo de uso de la vivienda sí que se nota”.
Más recientemente, han contratado un servicio de soporte documental. Además del considerable ahorro de papel, “ya ni las facturas ni los contratos pasan de mesa en mesa”. “Todo va con un soporte documental que nos hace más eficientes y más rápidos”. Además, los clientes ya no van a la caseta de información a firmar en las operaciones de compra, sino que firman de forma digital, lo que contribuye aún más a ser eficientes. En referencia al soporte documental, Rosa Angulo Sánchez detalla que “cuando entra la factura, el programa coge los datos que necesita y facilita el trabajo a los contables y administrativos, así pueden centrarse en otras tareas y se evitan errores, pues no es lo mismo tener que repasar que escribirlo”.
Actualmente se encuentran implementando un sistema de incidencias de obra con el objetivo de establecer un workflow o flujo de trabajo con las incidencias que reciben, recogiendo qué ocurre, qué se ha hecho al respecto y cuánto tiempo ha transcurrido desde que se inició la incidencia hasta que ha sido resuelta. “Esto nos ayuda a ver qué áreas se deben mejorar, detectar problemas y demás”.
No obstante lo anterior, afirman que “todo cambio brusco cuesta”. Yo estaba acostumbrada a recibir cuarenta facturas físicas diarias para pagar. Ahora que apenas usan papel y han digitalizado gran parte de los procesos, afirman a modo de ejemplo que han tenido que pasar de un monitor a dos, “uno para la factura y otro para tener el banco abierto”.
Grupo ANSAN ha mostrado su compromiso con el medioambiente y la sociedad que le rodea. Por un lado y relacionado con el medioambiente, utilizan placas fotovoltaicas para las zonas comunes de sus construcciones, así como aerotermia. Además, en cada promoción utilizan cinco cubas diferentes para el correcto reciclaje de todos los residuos que se generen.
También destaca el considerable ahorro de papel, pasando de consumir doce cajas al mes a dos cajas cada mes y medio. Junto a lo anterior, también se ha eliminado el consumo de botellines de agua, pasando de utilizar numerosos palés a ninguno gracias a las garrafas recargables: (“cada uno trae su botella y rellena el agua y no se gastan botellines”).
Por otro lado y en lo que respecta a la faceta social, contribuyen de diversas formas.
Primero, continúan trabajando con proveedores con los que llevan colaborando más de cuarenta años por motivos de arraigo y compromiso (“podríamos tener una oferta más económica, pero preferimos seguir con ellos”).
Segundo, colaboran con diversos equipos deportivos de Málaga y Sevilla, como el Club Baloncesto Alhaurín de la Torre y Unicaja (Málaga), así como el Club de Bádminton Rinconada, perteneciente a San José de la Rinconada (Sevilla), pueblo en el que nacieron los tres hermanos.
Finalmente, han colaborado, por ejemplo, con la Asociación Canina Coín, quienes hacen intervenciones con perros a niños con diversidad funcional, personas mayores y otros colectivos. En relación con esto último, han contribuido además con la financiación del tratamiento de aquellas familias que no podían permitírselo.
Es destacable la integración vertical que realizaron en 1997, asumiendo la función inmobiliaria y controlando todo el proceso de principio a fin: desde la compra del solar hasta la construcción, comercialización y entrega de llaves al cliente. Desde entonces, la familia empresaria no se ha aventurado a emprender nuevas aventuras empresariales más allá de las actividades propias de su sector. “No sabemos cómo saldrá la tercera generación. Tiene buena pinta”.
Subrayan que su padre criaba cerdos y no tenía ni para comer, fundando esta empresa de la nada. “Mayor ejemplo de emprendimiento que nuestro padre hay poco. Eso se nace con ello o no”. A pesar de ello, afirman que si no tienen muy definido el sentimiento de emprendimiento, lo intentan forzar ligeramente con formación. Asisten regularmente a cursos de negocios y similares, aunque el emprendimiento “algunos lo llevan más que otros”. “Al final intentamos que todos tengan ese sentimiento de emprendimiento y si no, tratamos de forzarlo. Siempre tratamos de estar en continua formación. También estudiando idiomas, somos mentes inquietas”.
Finalmente, destacan la relevancia de los aspectos no económicos en lo que a emprendimiento se refiere, poniendo como ejemplo la compra de unos solares en el pueblo en el que nacieron: “Aunque había motivos económicos, porque evidentemente no queremos perder dinero, también tiene un sentimiento emocional”.
Entrevistamos empresas familiares para poner en valor su labor social.
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